Máquinas de Guerra

Cañón Estremecedor

Cañón Estremecedor
Cañón Estremecedor

El Cañón Estremecedor es una formidable arma de destrucción y una de las más mortíferas del arsenal de los Enanos del Caos. Dispara pesados proyectiles cargados de potentes explosivos. Tras el choque contra el suelo, el proyectil se entierra profundamente y explota, provocando devastadoras ondas de choque. Además de destruir el objetivo, las ondas de choque son tan potentes que pueden derribar a las miniaturas próximas. Las tropas próximas al área de impacto quedan demasiado aturdidas por el impacto para poder luchar, o incluso para poder moverse. Todo lo que pueden hacer es permanecer en el suelo, confusas y aturdidas hasta que recuperan la orientación.

Lanzacohetes de Muerte

Lanzacohetes de Muerte
Lanzacohetes de Muerte

El Lanzacohetes de Muerte es una diabólica invención de los Brujos Enanos del Caos. Se compone de un cohete tubular propulsado por un propelente químico sintetizado a partir de las abundantes materias primas de la llanura de Zharrduk. El propelente químico es altamente inestable y extremadamente tóxico, y los esclavos que trabajan en las factorías de cohetes de Zharrduk raramente duran mucho. Los vapores venenosos y los mortales productos químicos inevitablemente matan a aquéllos que no son lo suficientemente afortunados para morir en una de las explosiones que tienen lugar regularmente.

Aunque los Enanos del Caos han construido y lanzado algunos cohetes extremadamente grandes, los mayores éxitos los han logrado con la pequeña arma de combate conocida como Lanzacohetes de Muerte. El proyectil disparado por esta arma mide aproximadamente dos metros de largo y está completamente cargado de propelente. Contiene una pequeña carga explosiva en su punta y su vuelo se estabiliza con alerones traseros.

Pese a lo ambicioso de los experimentos de los Enanos del Caos, sus cohetes no han demostrado ser demasiado fiables. Un cohete especialmente grande, tan grande como una torre y que se conoce por Martillo de Hashut, se desvió desastrosamente de rumbo y casi alcanzó a Zharr-Naggrund, aunque finalmente cayó sobre un campamento Goblin, creando un cráter en medio de la llanura de Zharrduk, de cientos de metros de diámetro. Afortunadamente, aunque en esta ocasión no se produjeron daño graves —con la excepción de los sufridos por los Goblins—, los Brujos Enanos del Caos decidieron sabiamente que era mejor relegar sus experimentos al distante y casi deshabitado desierto de los Aullidos del sur.

El cohete que dispara el Lanzacohetes de Muerte contiene una potente carga explosiva, pero a causa de su naturaleza impredecible, ésta no siempre explota en el punto donde cae el cohete. A veces el cohete se estrella contra el suelo y simplemente queda enterrado sin hacer explosión. En otras ocasiones, el cohete puede tocar el suelo y empezar a girar frenéticamente antes que el propelente prenda una vez más, lanzando el cohete en una nueva dirección. Un cohete fuera de control puede, por tanto, ir saltando y cruzando el campo de batalla aleatoriamente, cambiando de dirección varias veces antes de estallar.

Lanzavirotes Hobgoblin

Los Lanzavirotes o lanzador de dardos, son ballestas de gran tamaño que disparan proyectiles del tamaño de una lanza. Son armas tan grandes que deben estar montadas sobre su propio afuste, el cual está frecuentemente equipado con ruedas para que sea más fácil pivotar el arma. Normalmente es necesaria una dotación de dos o más miembros para poder tirar hacia atrás de los poderosos brazos de torsión del arma y colocar en posición de disparo el siguiente virote. A pesar de todo, los lanzavirotes no son en absoluto máquinas de guerra tan grandes y pesadas de transportar como lo son los Lanzadores de Rocas y los Cañones.

Fuente

Rick Priestley y Grant Williams, Ejércitos Warhammer: Enanos del Caos, Barcelona, Games Workshop, 1996, páginas 16 y 49-50.